domingo, 1 de noviembre de 2009

Vaya palabritas . . .


Por estas fechas muchos estarán escribiendo cuentos de terror o cosas alusivas al día de muertos . . . pero como que ya hay bastante de eso en la red como para tener más de lo mismo en el blog y justo este día ¿o no?, por eso haré algo diferente. Bueno, pues les cuento que hace poco me aventuré a comprar cierta revista que hace alusión al calificativo con el que nos nombran a los que habitamos en el Distrito Federal y en ella venía una lista muy curiosa de palabras que solemos utilizar los citadinos ya sea para designar algo o para ridicularizar u ofender a los demás, lo curioso es que la palabra por sí misma no molesta . . . es el significado que se le brinda en el contexto

Aquí se les dejo la famosa lista que, de una vez os digo, no es de lo más sublime pero bien nos hace reír:





Animal: lo que queda del hombre cuando pierde lo racional al volante.


Araña: beldad de ocho patas; (yo diría que son todas esas mujeres que aun siendo bastante feas se creen más o igualmente hermosas que miss universo y tienen todavía el descaro de alardear de su "belleza").

Ardilla: persona con un resentimiento así roedor.

Borrego: seguidor de sus semejantes.

Burro: experto en disertar sobre orejas.

Cabra: grado de la demencia en donde el paciente nos impacienta.

Cabrón: bestia cuya existencia depende del otro pen . . . sante.

Cerdo: individuo que si ve lodo, se atasca.

Chango: antecesores evolutivos que conviven entre nosotros.

Cochino: individuo que se refocila en la sociedad; perdón, en la suciedad.

Coyote: carroñero de la tramitología.

Dinosaurio: fósil que se perpetúa y nomás no se extingue.

Dragón: ser que en la boca le brotan fuegos que ya son mitológicos.

Ganso: palmípedo al que le tuercen el cuello los amantes.

Gata: peyorativo para referirise a la chacha.

Gato: individuo indiferenciado, pardo en la oscuridad.

Guarro: en la cadena evolutiva, más primitivo que los guaruras, que a su vez son más primitivos que los guardaespaldas.

Guajolota: femenino de tamal en su torta.

Loba: hembra rapaz, puede ir en manadas, o ser esteparia.

Iguanas: expresión de identidad entre dos elementos.

Insecto: lo que queda de un ser humano al privarlo de su ego.

Jaguar: primera palabra de un célebre saludo en inglés.

Mariposo: macho amanerado de lepidóptero.

Marrano: obeso porciforme.

Mona: sueño reparador tras una ardua jornada etílica.

Mosca: eso que haces tan bien mientras yo estoy tratando asuntos importantes.

Mula: inmovilista sin huevos.


Oso: (del inglés “bear”, soportar y también oso) ridículo acto de circo gratuito, sin la carpa, ni los osos.

Oso polar: úrsido de grandes magnitudes.

Pájaro: especie de ave que incendia los maizales.

Pato: palmípedo en el que nos gusta transformarnos con fines evasivos.

Perra: mujer que marca su territorio.

Perro: 1) profesor inclemente. 2) sabueso husmeador de feromonas femeninas.

Pez: animalillo que, bajo el agua, suelta burbujitas.

Rata: político mexicano.

Rana: conjuro que, al ser dicho, el aludido brinca.

Sapo: anfibio que canta cuando eructas.

Tigre: galán rayado con su suerte.

Vampiro: a) noctívago, b) darketo, c) chupasangre, d) insomne, e) todas las anteriores.

Vaca: mujer copa D en adelante.

Venado: calificativo que mortifica recibir si te lo dicen en la esquina.

Víbora: crítico ni constructivo, ni destructivo, sino constrictor.

Zorra: astuta con mejor piel que las perras comunes.




Fuente:
Revista Chilango, octubre de 2009.

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